fica para amanhã

con un aire inocente a pesar de su edad, decía que lo que a uno le nace es tratar de animar. pero claro, uno tiene derecho a quejarse. quería llorar. dijo que era una persona ansiosa. y que este tipo de personas quiere controlarlo todo. y escapa ocupando todo su tiempo en conseguir más. y que piensa, después de esto, descanso. pero resulta que después es un límite difuso. después resulta que después es siempre antes de algo.

(en ese momento me acordé de lo que no recuerdo
en la memoria ahora la veo como un huevo luminoso)

decía que se iba el 30. a fin de mes. tenía los ojos rojos. decía que escribiría, que tenía fotos. estoy casi segura de que no volveré a verla, aunque eso mismo pensé la penúltima vez. como despedida, me ofreció un abrazo. uno de ésos que se dan con ganas. sin escatimar cariño. sin ese ahorro mezquino al que me estoy acostumbrando.

le dije que sólo había aprendido dos cosas
que no quepo en nigún sitio
que puedo meterme en cualquier lugar

le dije que tenía una meta en la vida
ella habló de pasos cortos y de cómo
es mejor girar en las esquinas

así es la vida, decía
con un aire inocente
a pesar de su edad