7/4/07

no nos dejan salir, pero nos han dejado entrar

¿te has sentido solo alguna vez?
solo... realmente solo...


yo sí. es lo que respondí la primera vez. esta vez no fue tanto una pregunta. era un descubrimiento para ella. y esta vez añadí que todos hemos pasado por ahí. quiero creer que sí pero no sé. en esos momentos no hay mucho que hacer. no hay besos. labios. abrazos. palabras. ternura capaz. sólo miedo. mucho miedo.

un vacío a la altura del pecho.

mientras hablaba la escuchaba con todo mi ser.

y quizás el esfuerzo. quizás simplemente entender. le dije: "quizás... aunque hubieras estado ahí... no hubieras podido hacer nada... ella decidía... quizás... es una experiencia que no se le puede ahorrar a nadie..." y creo que lloraba porque pensaba que sí. y el mundo entonces...

me hubiera gustado poder seguir. tener más tiempo. más coraje del que tengo. pero hablé lo justo y mientras hablaba, me sentí realmente sola. y tenía miedo de que esa sensación no se fuera a acabar nunca. así que me agarré. me agarré fuerte. quise llorar pero no pude. mi cuerpo quiso vomitar, pero no le dejé. quería devolver lo que le había sido dado. devolver lo que era tan difícil de tragar. y digerir. me hubiera gustado tanto saber expresarlo! y que al otro lado de este puente interminable alguien me estuviera esperando. pero no fue así. no puede ser. así que caminé. y sonreí. escuché. me dejé ir. me caí. me tiré.


1 comentario :

Indalea dijo...

complicidad preciosa silenciosa
que acabo de romper para mirarte caer

la soledad
es un caprichoso encanto

One cannot be deeply responsive to the world without being saddened very often. // Erich Fromm