29/2/08

hiperintención


el despacho olía mal. una mezcla de sudor y ansia contenida. es un olor que conozco por las pesadillas. como ese sabor ácido del miedo cuadrado en la garganta. y ese otro más amargo, un sabor que encuentro en las bocas que no debería besar. me equivoco tanto. lo intento lo intento lo intento. dramatizo. me calmo. estoy aprendiendo a ser de otra manera. y funciona. va mejor. aunque el mundo me agota. y nos miro y nos veo: demasiado empañados. demasiado empeñados en conseguir algo llamado éxito. algo que no hemos definido desde un buen principio.

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One cannot be deeply responsive to the world without being saddened very often. // Erich Fromm