ayer
cuando paseábamos
como si escapáramos de algo
que quedaba
paradójicamente
siempre delante
nos ladraron muchos perros
todos tras sus rejas
y sus dueños
dormidos o acostados
con el porvenir
tras sus ojos
y mientras
caminábamos
con la jaula adentro
también nosotros
y el corazón travieso
encajonado
y el paso directo
del que quizá no
sabe bien a dónde va
pero sí
de dónde
y a dónde nunca más
26/09/09
No hay comentarios :
Publicar un comentario