nada personal

sigue esta conversación hasta el final
casi hace frío
estamos lejos de las tardes de iruña
sacrificando el tiempo en el templo
de la impotencia
deseando morir a ratos
comenzando cada noche una nueva vida
estamos lejos de las tardes de la calle mistral
en esta misma ciudad pero lejos
lejos de la azotea y los pájaros
pintados de colores por mano desconocida
casi hace frío
la nostalgia no dura
escribo para no perder la compostura
cuando pienso que ha cambiado nada
la vida está fuera del cuadro
sólo que ahora
estoy más aquí que nunca
sin poder evitarlo

quería llorar sin que nadie me dijera: ánimo
sin que nadie supiera que estoy comunicando
un secreto
sin que nadie pudiera darme la razón
ni desviarme de mi tránsito

llevaba demasiado peso
tenía miedo pero
le doute est tranquillisant
si dudas es que cabe la esperanza
nada propicio pero
sincero
el interior agrietado
y la necesidad
de coger perspectiva
cualquier cosa lejos de este viaje quieto
donde no